domingo, 30 de septiembre de 2007

SLAVE TO THE RHYTHM


Slave to the rhythm, 1985, es otro àlbum en mi colecciòn de cassettes. Mi amigo Ivàn, quien grabò esta joya hace muchos años, inteligentemente incluyò en la grabaciòn todas las mezclas o variaciones del tema Slave to the rhythm presentes en algunas ediciones del mismo.

En una de ellas el publicista y svengali de Grace, Jean Paul Goude, recita o relata en recitativo còmo conociò a la jamaiquina: "En una disco en New York mientras cantaba I Need a Man una mujer que parecìa un hombre frente a una multitud repleta de hombres gay". Se enamoraron, se casaron y tuvieron un hijo.

Slave..., surgiò como una idea del productor Trevor Horn quien un año antes se hiciera famoso por su trabajo con FGTH o Frankie goes to Hollywood, concretamente el archiconocido tema Relax. Horn tambièn produjo mucho màs tarde a Lisa Stansfield, Pet Shop Boys, Marc Almond y Tina Turner. El àlbum tambièn contò con la participaciòn de otro peso pesado del disco y del soul americano, Nile Rodgers, a su vez integrante de la banda Chic. Ya Grace para aquel entonces era mundialmente famosa, gracias a su amistad con Andy Warhol.

1985 fue un año bastante frutìfero para la artista. Un performance en el mìtico club Paradise Garage en el que su cuerpo entero lucìa una fantasìa Masai pintada por Keith Haring la convertirìa una vez màs en la reina imbatible del pùblico homosexual y disco del momento.
Es difìcil clasificar Slave to the Rhythm bajo un estilo. Es su despedida al disco music, llena de grandeza musical y de coqueteos con el dub y un muy estilizado R&B. Jones ha sido siempre muy versàtil y no se reduce a un determinado estilo. Por ejemplo La Vie en Rose, del àlbum Portafolio, es una versiòn del tema emblemàtico de Edith Piaf y I Need a Man, un tema totalmente disco. Warm Leatherette, su cuarto àlbum, es un mèlange de gèneros: soul, reggae y R&B que contiene el maravilloso tema Love is the drug. Luego en Nightclubbing, està la increìble pieza Pull up to the bumper que alcanzò el segundo puesto de la cartelera Billboard en el año 81 y remezclada ad infinitum por Larry Levan, el dj residente de Paradise Garage.

Lo que màs me gusta de Slave to the rhythm es el nombre. Quienes mucho disfrutan de la mùsica se encontraràn con frecuencia dentro de la raza de esclavos del ritmo: love to the rhythm, dance to the rhythm, work to the rhythm.

En el lado B de la cinta està: Blondie`s One way or another, Call Me, un remix de Call Me cuya autorìa desconozco y Rapture. Mi favorita es Rapture, el primer rap cantado por una mujer blanca en 1981. Toda una audacia propia de Deborah Harry. Vale la pena mencionar que Rapture es de los primeros videos de la historia del video o clip como tal. Otra curiosidad es la apariciòn del artista Jean Michel Basquiat allì como dj.
Call Me es una canciòn de chicas y parte del soundtrack de American Gigolo. El tema fue producido por el creador por excelencia de casi todos los èxitos del disco music, Giorgio Moroder, tambièn responsable por la fama de Donna Summer.

lunes, 24 de septiembre de 2007



WALKING ON THE WILD SIDE
Uno de los cassettes que he venido oyendo y que afortunadamente nunca botè es una mezcla alucinante de Lou Reed y Velvet Underground por un lado y, por el otro, el soundtrack de la pelìcula Las Cosas del Querer. Esta banda sonora es de 1989 y de lo màs entretenida.
El tema Las Cosas del Querer està cantado por Manuel Bandera y Angela Molina -los protagonistas de la pelìcula-, como Compuesta y sin novio por Marìa Barranco, Las sevillanas del Espartero por Bandera y que es una sevillana como dios manda. Todos los otros temas se ajustan màs a las coplas y pasodobles abrazados si se quiere dentro de la zarzuela y pues eso recuerdo bien del filme: un musical con un poco de todo.
En Compuesta y sin novio, Barranco canta: "yo estoy compuesta y sin novio porque tengo mis razones, marìo, suegra y cuñao, diez niños, y uno de crìa, que la plaza, que la gripe, que tu madre, que la mìa... son muchas complicaciones, soltera pa toa mi vida... Me encuentro yo al matrimonio tos los domingos en el cafè, las caras de avinagraos porque se aburren màs que ciprès. Los niños rompen las tazas y con la fuerza de un albañil le meten a padre y madre las cucharillas por la nariz. Con el barberooooo, no me he casao y del martirio de las cucharas yo me librao..." Ahora recuerdo que es el nombre de una pelìcula española tambièn con Pilar Bardem, y del 94.

Herencia Gitana es una hermosa copla compuesta por Ramòn Perellò y cantada por Angela Molina: "Me dejaron de herencia mis pare', además de la luna y el sol, una bata cuajá de lunares, que conmigo el mundo recorrió. Un borrico y un par de panderos, muchas ganas de no hacer na', y talento pupila y salero pa poder en la vida arrastrar."

Walking on the wild side escrita e interpretada por Lou Reed y tema tributo a las tres dragqueens de Warhol, Holly Woodlawn, Candy Darling, Jackie Curtis y al actor, tambièn de Warhol, Joe D`Alessandro volviò a arrancarme las làgrimas que solìa derramar hace mil años cuando la oìa y era aùn una chiquita de 18 años. Mi verso favorito es: "In the backroom she was everybody`s darling/But she never lost her head/Even when she was giving head" y eso que aùn sigo pensando que dice: ...but she never lost a hit..., pero esa soy yo de loca. Si antes de Walking on the wild... fue el lìder vocalista y guitarrista de Velvet Underground, supongo que los temas que tengo en el cassette tienen que haber sido antes del 72, antes de despedir a Nico y a Warhol, por lo tanto: Heroin, Venus in Furs y Femme Fatale. Me encanta tenerlos y en ese cassette, pero suelo adelantarlos o escucharlos mientras hablo.
LOS RÙSTICOS & POWER TRIP de sus choferes

Siempre manejè. Desde los 18 años estuve al frente de mi primer y ùnico carro, un Fiat Uno que me llevò y regresò de la universidad por casi cuatro años. A los 4 meses de tenerlo ya tenìa, segùn mi padre, "màs porrazos que una campana de bomberos". Ahì guardaba gran parte de mis libros y apuntes y pare de contar, por lo que -tambièn segùn mi padre- parecìa un sòtano. Durante algùn tiempo sirviò para otros propòsitos, pues ni yo ni mi amigo de aquella època tenìamos para costear el gasto del lecho y el Fiat cumplìa reservado. Eso durò hasta que oì que el sexo en el carro terminaba por empavarlo. Y no sè si por conjuro o por decreto o por ser ese su irreductible final, tuve que venderlo luego de un choque y comenzò mi vida de peatona.
Hace poco, y por razones muy largas de explicar, comencè a conducir de nuevo. Si bien es una comodidad y supone cierto grado de independencia -no cuando se està atrapado en tràfico a nivel superlativo-, tiene sus bemoles: los que suspenden la mano en la corneta por todo y por largo tiempo y deberìan ser multados como en otros lugares del mundo en los que el ruido es contaminaciòn ambiental; los que nunca sienten que deben hacer cola y por eso toman atajos que no lo son y cortan la cola aparecièndosele a uno lateralmente y apetece patearlos; los que no soportan que exista gente que no quiera comerse la luz y revientan la corneta y te gritan hasta que lo haces -nunca les doy el gusto-; los que siempre quieren ir tan veloces y se te montan detràs del parachoques para que los dejes pasar, y muchos otros.
Soy especialista en hacerles perder la paciencia a todos los anteriores, quienes por cierto y generalmente guìan rùsticos o jeeps con enormes ruedas o Blazers o sucedàneos.
Es muy fàcil, en lo que los veo venir arrogantes y con el power trip que el camiòn les ofrece, les saco la mano y les sonrìo. Esa no la admiten viniendo de una chica de edad madura y en un Corolla cuyo año no revelarè. Les enferma.
Como ya he sufrido algunos episodios fuera de orden en esta ciudad y en otras, me encomiendo a mis acumulados de bondad y buen karma, no vaya a ser que se me salga una patada voladora que alguna vez ya me ha ocurrido.
Los semàforos los cruzo con extrema lentitud para que se les vuele el fusible, ojalà, y trato siempre de pegarme todo lo que puedo del carro delante de mì para que asì no puedan los vivos colearse cuando hay colas.
Una vez iba para el cine con un amigo -una de mis yeguas apocalìpticas- y un pavito nos hizo un pique o nos tirò el carro -un Toyota como una catedral- o como quiera que se llame la afrenta en el argot de rùsticos. Le saquè la mano y tàcata y mi amigo, sin invertir mayor atenciòn, me dijo: "seguro que lo tiene mìnimo". Y esa noche en un segundo lleguè a esa clarìsima conclusiòn: ahì està todo el power trip de su vida, en su carro, en nada màs. Pobre, tambièn lo tendrà mìnimo.